El esfuerzo por crecer o mejorar nuestras vidas nos lleva ha que hagamos sacrificios para lograrlo, de los cuales nos permite ver mejor cada una de nuestras acciones, errores fracasos los cuales nos llama ha iniciar nuevamente y en muchas ocasiones mejorar nuestro carácter, ser eficaz y por supuesto mas pragmático.
Queremos todos una Honduras mejor, con verdaderas oportunidades, ciudadanos protagonistas del desarrollo, que puedan generar de nuestra misma realidad un mejor camino para las futuras generaciones, que siempre que miremos atrás sea para no cometer errores del pasado, en la cual nos empoderemos de la creación de espacios e instancia y políticas públicas en las cuales podamos ver igualdad, solidaridad, participación e inclusión a cada Hondureño.
Tenemos miedo de decir lo que pensamos en un país donde existe la libre expresión o será que no vivimos a plenitud esta realidad, observar que nos limitamos siempre al potencializar nuestra formación por barreras imaginarias donde pensamos que aun estamos esclavizados y no podemos hacer nada sin autorización de nuestro amo, ¿Qué nos pasa?¿ Porque soñar? Será que no tenemos un sueño hecho realidad, será que creemos que son imposibles de realizar, será que no tenemos realmente un verdadero referente de ideales si no más bien una herencia que asfixia y doblega las grandes ideas de cada ciudadano.
Vernos en la necesidad de tener que dejar nuestra bella patria y vivir de lejos nuestro orgullo patriótico como sacrificio para tener una verdadera oportunidad de mejorar nuestra vida, será que los y las jóvenes hemos ya olvidado nuestros ideales y nos hemos adaptado al sistema de invisibilización, marginación y discriminación.
Demostrar que nada es imposible, en una lucha de dificultades es difícil cuando tenemos siempre barreras de lineamientos que día a día nos dictan formas de pensar, de hacer las cosas la cual no permite ver la verdadera libertad, donde cada individuo pueda ser el eje central de una sociedad, demostrar su creatividad.
¿Realmente nos podemos unir por una Honduras mejor? Será difícil contestar una pregunta donde enarbola temas centrales de división y en debates estériles, donde cada uno de los sectores de nuestra querida y bella patria, en la cual vemos cada día una Honduras con problemas que tenemos muchas soluciones en común, pero siempre puede mas el orgullo, el egoísmo y mas que esto nuestra actitud como Hondureño al hacer caso omiso a nuestra realidad al no querer aceptar responsabilidades de un verdadero ciudadano, porque si queremos ser una patria mejor y estamos consientes de que todos queremos lo mejor siempre hay un punto que detiene ese sueño de cada Hondureño de ver un país diferente, con verdaderas oportunidad para cada ciudadano, en el cual deberíamos por un momento hacer un lado el fanatismo de grupos y prioricemos los puntos que nos unen de los cuales no tengo la menor duda que son mas de los que nos dividen.
Será que solo soy un soñador que mis criticas de querer ver una mejor nación hacen obviar el desarrollo que hemos alcanzado donde la historia nos ha marcado con dictaduras de exclusión social, donde muchos de nuestros generaciones fueron perseguidas por soñar, por expresar sus opiniones, por querer hacer una honduras mejor oh simplemente por no compartir su forma de pensar y que ya hemos superado esto pero aun no encuentro la motivación de porque ser conformista será que le exijo demasiado a nuestra sociedad, la cual se conforma con soñar cada cuatro años y frustrar esa semilla sembrada por las grandes decepciones de nuestra cultura política, pero con la esperanza que la siguiente se sembrara en tierra fértil y que esta si dará el fruto esperado.
Ser un ciudadano conciente de la realidad nacional y cansado de los políticos vacíos q creen q por su cara bonita oh lenguaje sofisticado donde los hacen ver como lo mas perfecto en la política pero q definitivamente es incongruente a sus acciones muy alejados de un compromiso con nuestro país oh ser oferente a la demanda de una nueva cultura política...
Jóvenes que nos enorgullecen generaciones brillantes y talentosas, fuera de vicios, de los cuales sin lugar a dudas vemos esperanzas de ver nuestra sociedad forjando un camino mejor para nuestra presente y futuras generaciones.
